Primero elimina de tu cabeza la siguiente idea: hay un pediatra ideal. Es poco probable que un médico llene tus expectativas, sin embargo, podemos tener uno que cumpla en un 95% lo que deseamos.
Los puntos más relevantes son:
- Que tenga disponibilidad para consultas los 365 días del año
- Te debe escuchar antes de emitir una recomendación
- Que revise de manera completa a tu hijo
- Debe tener una buena relación con tu pequeño
- Tiene que explicarte de forma sencilla el padecimiento del niño
- Te explicará en que consiste el tratamiento que recomienda, así como sus pros y contras.
Toma en cuenta que siempre será mejor tener a un pediatra cerca de tu domicilio ante cualquier emergencia, toma en cuenta esto al momento de la elección y revisa también los hospitales más cercanos para acudir a ellos en caso de emergencia.