Si en repetidas ocasiones tu hijo se ha negado rotundamente a prestarle su juguete a otro niño, tranquila. Eso no significa que lo estás educando mal o que tu hijo es el más malo del mundo.
Alrededor de los 2 y 3 años de edad, tu bebé comenzará a decir una de sus palabras favoritas: “no”, con ella, él estará marcando sus deseos y propias intenciones. A esta edad, comienza a nacer su propia identidad. Se siente el centro del universo, por lo que identifica bien lo que es de su propiedad y difícilmente permitirá que alguien más lo tenga.
En esta etapa no sólo se negará a prestar cualquier juguete u objeto que sea suyo, tampoco querrá comer como antes lo hacia, y si no se le concede algunas de sus peticiones hará uno de los más grandes berrinches en la historia.
¿Qué puedes hacer?
- No lo obligues a prestar su osito de peluche favorito o podría volverse posesivo con sus cosas.
- Si se acerca una fiesta en tu casa, mantén a la vista los juguetes que de antemano sabes, no son sus favoritos. O bien, procura hacer actividades en grupo donde todos se diviertan e interactúen.
- Ayúdalo a comprender lo que siente. Explícale que su primo no se llevará para siempre su juguete, sólo lo tomará por un rato.
- Respeta que tu hijo no quiera prestar en ese momento sus juguetes. Sin embargo no permitas que pueda ser grosero con los demás.
- Ten mucha paciencia pues sólo se trata de una etapa de crecimiento en tu hijo.