Encontrar el juguete ideal para el niño es una tarea que necesita tiempo y atención, porque entre tantos estímulos publicitarios, precios y modas a veces es difícil no marearse y elegir bien.
Como para tener una guía, los padres, tíos o abuelos pueden basarse en estos consejos para dar con el juguete perfecto:
- En principio es fundamental mirar y darle importancia a las indicaciones de seguridad del juguete, verificando además que sea el indicado para la edad del bebé o niño.
- No comprar juguetes en establecimientos no especializados y optar por comercios responsables donde se vendan juguetes originales y donde puedan informar, asesorar, saber de la procedencia del juguete y posibilitar un futuro cambio o reclamo en caso de que sea necesario.
- Elegir juguetes que permitan el protagonismo del niño y una actitud activa para que realmente sean estimulantes y divertidos para ellos, evitando que se conviertan en meros espectadores del juguete.
- No elegir juguetes solo por su carácter instructivo o “educativo”. El juguete debe ser divertido e interesante para el niño, y si no lo es, no cumple con su cometido.
- Tratar de no dejarse llevar por la publicidad, que muchas veces puede ser engañosa. Si bien hay que tenerla en cuenta para conocer qué hay en las jugueterías o lo que puede llegar a gustarle a los chicos, no necesariamente hay que comprar eso que está de moda o que se repite constantemente en las pautas publicitarias.
- No comprar un juguete en particular porque es caro. El precio no va de la mano de la diversión o la calidad. Un juguete barato puede ser muy divertido para los chicos y un juguete costoso, sofisticado y complejo puede que no sea enriquecedor.
- No decidir en base al gusto propio: elegir en base a lo que uno jugaba o le gustaba hacer de chico no siempre es la mejor opción, porque los tiempos han cambiado y los gustos de los chicos, en parte, también.
- Conocer lo que se está comprando: sea un jueguito para las consolas, juguete o juego de mesa, es importante que los adultos sepan cómo funciona, cómo se juega, cuáles son los personajes, las reglas, etc. Porque hay juegos con consignas que no son adecuadas o ideales para la infancia.
- Elegir un juguete que no sea sexista, bélico, violento o que transmita valores contrarios a los inculcados en casa.
- No regalar siempre un juguete similar o el mismo tipo de juego cada vez porque al niño le “encanta”. La variedad ayuda a que el chico disfrute de experiencias diversas y estimula su desarrollo desde diferentes puntos de vista.