El crecimiento y desarrollo de cada ser humano es diferente y lleva su propio ritmo, mismo que hay que respetar y no compararlo en este caso, con otros bebés. El desarrollo del bebé, sus primeros balbuceos, sus primeras palabras, sus primeras papillas, sus primeros dientes y, sus primeros pasos se dan en diferentes tiempos y circunstancias. Cada bebé es único.
No hay una regla ni una edad específica, hay bebés que tratarán de dar sus primeros pasos desde los 9 meses, algunos otros hasta los 12 e inclusive hasta los 16 meses, más bien tiene que ver con su desarrollo motriz y cuando se sienta seguro y capaz de hacerlo. Desde su nacimiento y hasta este punto, fue desarrollando fuerza en los músculos de todo su cuerpo y coordinación. Las fases o etapas por las que pasa un bebé antes de dar sus primeros pasos son: sentarse, voltearse o rodar, arrastrarse, gatear y, posteriormente pararse y quedarse quieto sosteniéndose de algún mueble, sofá o cama, antes de dar sus primeros pasos y lanzarse a caminar. Aquí te mostraremos el detalle de cada una de estas etapas.
Sentarse y rodar:
Una vez que es capaz de sentarse es que ha desarrollado los músculos del cuello y brazos lo suficiente para mantenerse erguido, esto ocurre aproximadamente entre los 4 y 7 meses. Simultáneamente y teniendo un mayor control de su cabeza, podrá rodarse de su espalda (boca arriba) a su panza (boca abajo) y viceversa. Mantenerse estirado boca abajo con la cabeza erguida durante algunos instantes, implica un buen desarrollo de los músculos de su espalda y cuello. Sentarse y rodar le ayudará a fortalecer los músculos necesarios para pasar a la siguiente etapa.
Arrastrarse y desplazarse:
Una vez que domine el sentarse y rodar, querrá desplazarse, ya sea hacia ti o hacia algún juguete que quiera alcanzar. Ya cuenta con la suficiente fuerza en brazos y piernas para empujarse o arrastrarse en cualquier superficie que se encuentre, ya sea la cama, dentro de su cuna, un tapete o el suelo. Este proceso será repetitivo e irá incrementando hasta que lo domine por completo y se convierta en un movimiento mecánico, que puede ser hacia atrás, hacia adelante o hacia los lados. Además de ganar fuerza en toda su columna vertebral, mejora y estimula su visión al enfocar el objetivo a alcanzar, comienza a comprender el entorno que lo rodea y comienza la coordinación entre los brazos y piernas. Una vez dominado el arrastre o desplazamiento, estará listo para la siguiente etapa que es gatear.
Gatear:
Se denomina gateo cuando el bebé es capaz de levantar su tronco (panza) del suelo y sostenerse de sus extremidades, ya sea codos, manos, rodillas o pies, hay diferentes maneras de gateo, todas ellas incluyen la coordinación paulatina entre brazos y piernas.
El gateo además, requiere de fuerza en los músculos del abdomen y glúteos, inicialmente solo levantará su pancita sin moverse y conforme vaya adquiriendo mayor fuerza y confianza podrá impulsarse y desplazarse de un lado a otro. El gateo y desplazamiento, lo lleva a lugares nuevos (puede ver el piso y la parte baja), pero al combinarlo con estar sentado, amplía su espectro de visión, es decir, sentado puede ver y observar todo su entorno y descubrir por sí mismo, nuevos lugares sin necesidad de que lo carguen, lo cual despertará su curiosidad y querrá andar por todos lados que le sea posible, en este paso, tener especial cuidado si hay escaleras (poner alguna barra protectora), enchufes (taparlos), esquinas de mesas (protegerlas), etc. Una vez que domine el gateo, pasará al siguiente paso que es levantar sus brazos para buscar apoyarse de lo que tenga cerca, para intentar ponerse de pie.
Pararse, sus primeros pasos y caminar:
Una vez que intenta agarrarse de muebles o de tu mano para intentar ponerse de pie, es que está listo para caminar, basta que tenga confianza y equilibrio, que éste último le será muy fácil de adquirir con la práctica. Sus músculos están lo suficientemente fuertes y desarrollados para comenzar con esta nueva aventura. El estímulo que lo lleva a dar sus primeros pasos es seguir descubriendo y explorando su entorno, en muy poco tiempo, estará caminando y ¡corriendo!
Respetar cada etapa de su desarrollo requiere de mucha paciencia y amor, cada fase conlleva un crecimiento y madurez por lo que es importante no saltar ninguna etapa, sino todo lo contrario, que la desarrolle el mayor tiempo posible para un sano desarrollo. Una vez que gane confianza y equilibrio está caminando y pronto corriendo y saltando. Disfruta mucho de esta etapa que no regresará nunca.
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